Sebastian se negó a seguir de pie en el mismo lugar y se
encamino hacia su habitación, Gurrel por su parte seguía incrédulo, no se movió
ni un milímetro de su lugar. Evan interpreto inmediatamente la mirada de su amo
y lo siguió hasta su recamara.
-
¿Señor Sebastian?... ¿se encuentra bien
Señor? – se acercó hacia el-
-
Lo sabes cierto Evan – lo miro a los
ojos – lo que sucedió después de aquella pelea cierto – se puso de pie.
-
Evan lo miro inexpresivo – Si señor,
pero es algo que el joven Gurrel debe saber – respondió.
Gurrel se percató de la ausencia de sus acompañantes y se
dirigió hacia la elegante habitación de
Sebastian. – Señor, ¿Se encuentra bien? –
-
Sí, me disculpo, podemos continuar la
entrevista aquí por favor – indico él.
-
Sí, claro. – respondió.
Después de caer inconsciente por la magnitud de la pelea,
desperté recargado en un tronco no muy lejos de donde había desfallecido, mire
al cielo que dejaba ver rayos de sol que atravesaban las oscuras nubes de la
tormenta pasada. Al revisar mi cuerpo como pude note los daños de inmensas
magnitudes por todos lados, quede impresionado de seguir con vida, entonces….
-
Por fin te despertaste – una cálida y
acogedora voz me anuncio que no estaba solo.
Voltee mi rostro en busca de aquella dulce voz, cuando
mire hacia la izquierda, la vi por primera vez, ella estaba sentada en cuclillas
a mi lado, con amabilidad atendiendo las heridas de mi brazo izquierdo, ella estaba
vestida de una forma muy extraña, que se asemejaba a la forma de vestir de
Mikaell, su cabello castaño a poco de ser dorado muy brillante le llegaba hasta
los hombros, su piel blanca como una ave de paz, sus ojos verdes como los
arboles recién regados por la lluvia y que se complementaban con unos labios y
una nariz pequeña, complementaban sus facciones angelicales que destacaban esa
sonrisa hermosa…
-
Quede inmediatamente enamorado de ella -
-
¿Quién… quien eres tú? – pregunte
anonadado por su belleza.
-
Fue una pelea muy fuerte – comento ella
al momento que tomaba mi brazo izquierdo con sus cálidas manos, mi sensación
fue de confort inmenso.
-
¿Viste la pelea? – le pregunte – era
algo obvio pero quería oírla hablar una vez más.
-
Si, conque finalmente ocurrió he, el
despertar del Sharingan del heredero al trono de valquiria – me respondió
mirándome a los ojos.
Me quede perdido viendo esos hermosos ojos, no pude
evitar sonreír al verla tan de cerca.
-
Si, los Trancy….- hice una mueca de
dolor reprimido – realmente son fuertes, no por nada son los soberanos de
valquiria y del Sharingan – baje mi mirada al recordar el resultado de mi
batalla con Alois.
Ella me miro con sorpresa en su rostro y desvió su mirada
a mi brazo ya tratado y sonrió – Pero tú eres más fuerte que Alois Trancy –
dijo ella.
-
Je – reí ahogadamente – yo, claro que
no, yo soy un Phantomhive, él es un Trancy – le replique.
-
La única diferencia entre Alois y tu
radica en las habilidades que él ha aprendido, si tu dominaras esas mismas
habilidades serias mejor que el – me comento sonriendo al termino del mismo.
Sus palabras sonaron tan convincentes que eso me hizo
sumergirme en un sinfín de pensamientos.
-
¿Quién eres tú?.... ¿Por qué haces esto?
– la interrogue.
Entonces ella no me respondió y sentí una sustancia muy
espesa como jalea verdosa que con una inmensa delicadeza frotaba sobre las
heridas de mis brazos.
-
Mi nombre es Lilian Valerius – me respondió
y me regalo otra sonrisa angelical.
Continuo frotando esa sustancia extraña por todo mi
abdomen mal herido, con tanta concentración como si estuviera en una cirugía de
vida o muerte. Entonces se puso de pie y tomo una manta blanca y la coloco
sobre mis piernas justo debajo de mi abdomen gelatinoso y verde, entonces note
que ya no tenía puestos los tenis que llevaba, de pronto ella en un movimiento
rápido pero delicado al mismo tiempo me despojo de aquellos dañados pantalones.
-
¡Haaaa! – exclame del dolor provocado
por su acción.
Levante la cabeza para poder apreciar mis piernas, que al
parecer eran las que estaban más dañadas, mire mis pantalones los cuales
estaban manchados de lodo líquido y tierra derivada del mismo, con pasto y
sangre en una mezcla brutal. Entonces Lilian comenzó a untarme la misma extraña
sustancia verdosa en las piernas, era una sensación realmente re confortable,
pude sentir como mi rostro se ruborizaba de placer.
-
No seas tan llorón, después de una pelea
tan difícil como esa, esto debe estar haciéndote cosquillas ¿No Sebastian? – me
comento después de sonreír y continuo untando esa sustancia en mis piernas.
Yo solo podía sonreír discretamente para tratar de
disimular mis expresiones de dolor, entonces
trate de mover mis brazos para tratar de tomar sus manos pero por alguna
extraña razón estaban adormilados.
-
¿Qué me sucede, porque no puedo mover
los brazos? – exclame preocupado, continúe tratando de mover los brazos sin ningún
resultado – ni siquiera puedo sentir los dedos – añadí.
-
Tranquilízate – me sugirió. La sustancia
que te puse adormece el cuerpo para permitirme curar tus heridas – respondió.
-
¿Lilian,
por qué haces esto? – la cuestione nuevamente en busca de una mejor respuesta
que la anterior. Ella me miro serena.
-
No lo sé,- dijo ella y desvió su mirada
nuevamente. Solo te vi tirado, derrotado
y mal herido y quise ayudarte, solo por eso
-
Su respuesta no era lo que yo esperaba o mejor dicho, no
era lo que yo quería escuchar. Yo la mire con dudas nuevas que surgían en mi
cabeza.
-
Lilian, ¿pero cómo supiste que peleaba
contra Alois Trancy? … ¿y por qué dices que soy más fuerte que él, si nunca lo
he podido derrotar? – la mire – y principalmente ¿Cómo supiste mi nombre? –
Esas preguntas se volvieron un remolino en mi mente,
aguarde paciente por una pronta respuesta, pero ella solo se levantó y se dirigió
hacia otro enorme tronco empapado por la lluvia y tomo un jarrón muy extraño de
lo que parecía ser oro puro.
Se colocó en cuclillas nuevamente y perdió su mirada en
el interior del jarrón.
-
Yo pasaba por aquí cuando vi al inconfundible
hijo de Dereck Trancy y lo vi herido a él también, entonces vi tu cuerpo tirado
en el suelo y escuche como se burlaba de ti – me miro - además Alois menciono tu nombre cuando se marchaba
– miro fijamente el camino por el cual Alois se debió de haber marchado
triunfante después de la pelea y devolvió su mirada hacia mí.
Como esa era una
respuesta muy aceptable y convincente no pregunte nada más por un rato,
simplemente deje salir una sonrisa y recosté mi cabeza completamente contra el
piso, me quede contemplando las hojas destellantes que brillaban con el chocar
de los alientes rayos de sol y las pequeñas gotas de agua que quedaron como
recuerdo de aquella terrible tormenta.
-
Bien todo tu cuerpo esta adormecido
ahora – dijo ella. Trate de moverme sin lograr ningún resultado – sí,
completamente – le confirme
-
Ahora no grites, te sanare esas heridas
en unos segundos – me advirtió mientras se colocaba en mejor posición de lado
izquierdo de mi cuerpo y contemplaba aquel jarrón de oro.
De repente, comencé a sentir una vibra extraña en el aire
entonces:
-
¡Sharingan¡ - grito ella.
Entonces el ambiente se llenó de cosmos, un cosmos muy extraño,
de pronto, sin voluntad mi Sharingan se activó de nuevo al instante de que ella
activaba el suyo.
-
¡Un Sharingan¡ - exclame sorprendido.
Ella no dijo nada, entonces vertió aquella misteriosa
agua sobre mis heridas, como me lo esperaba por lo adormecido de mi cuerpo no
sentí dolor alguno, estaba impactado de lo que veía, todas mis heridas se
curaban al contacto con aquella extraña agua.
-
¿Qué me estás haciendo? – pregunte.
-
Mi Sharingan me permite manipular la
energía del cosmos del lugar de donde me encuentre , tomar su energía y
filtrarla en cualquier objeto inanimado, por ejemplo esta agua para curar tus
heridas – me respondió sin perder la concentración – por eso tu Sharingan se activó.
-
¡Increíble¡- comente.
-
he terminado – índico ella poniéndose de pie.
Observe todo mi cuerpo y quede impresionado al verlo
completamente sanado, en un movimiento casi involuntario me incline hacia adelante
y pude darme cuenta de que ya podía moverme con libertad, dirigí mi mirada
hacia ella y solo pude devolverle una sonrisa de agradecimiento e impresión.
-
Ten vístete – me dio mi ropa en un movimiento
rápido y silencioso.
Entonces recordé que la manta solo me cubría parte del
cuerpo, me vestí como pude y me puse de pie, me sentía completamente aliviado,
era algo impresionante. Entonces el cosmos, sus ojos y los míos regresaron a la
normalidad.
-
Gracias… ¿cómo podría agradecértelo? –
pregunte casi mecánicamente.
Ella simplemente se dio la vuelta y camino unos cuantos
pasos mientras sacaba algo de uno de sus bolsillos entonces me dijo:
-
No necesitas pagármelo, pero si quiero
que me hagas una promesa a cambio – me dijo
-
¿Una promesa? – pregunte estupefacto.
-
Si – se giró hacia mí y tomo mi mano
derecha y coloco el anillo blanco de Alois en mi palma – tu eres más fuerte que
Alois Trancy… lo sé por el cosmos que cada uno de ustedes despide de su
Sharingan – comento mirándome a los ojos.
Entonces mire su mano con la cual sujetaba la mía y pude
apreciar que llevaba un anillo parecido al mío pero con una estrella en su
centro. No pude articular ni una palabra de lo sorprendido.
-
Sebastian Phantomhive, prométeme que
entrenaras una y otra vez, para que la próxima vez que Alois Trancy y tu
vuelvan a pelear tú lo puedas derrotar –
Sus palabras sonaban tan seguras, tan directas y tan
intrigantes que respondí que si casi involuntariamente. Ella dio media vuelta y
comenzó a caminar mientras me decía:
-
Tu y yo nos volveremos a encontrar
Sebastian y para entonces espero que hayas cumplido tu promesa… estoy contando
con ello.
Lentamente su silueta se fue desvaneciendo entre los
arboles de aquel sendero.
-
¿y que hizo usted? – pregunto el
entrevistador.
-
Me quede observando cómo se marchaba,
apreté mis puños con fuerza, ahora tenía un motivo más para derrotar a Alois
Trancy… y estaba dispuesto a hacerlo – respondió el hombre casi de inmediato
perdiendo su vista entre los arboles de la ventana, ocultos por la oscuridad de
la noche.
-
Lilian Valerius – fue lo único que
pronuncie después de que se marchó.
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Por favor respeta esta obra y no la robes ni la modifiques considera que es para entretener a lectores con nuevas formas de lectura y me cuesta mucho esmerarme para que esto salga bien a si que por favor respeta los derechos de autor.Por tu comprensión Gracias.